Los naipes de la Rueda de la Fortuna y la Sacerdotisa auguran un cambio espiritual en nuestro interior, saldremos de una situación de duda interna y tomaremos la decisión más correcta en aquello que nos perturba, la que veamos más justa.
La rueda de la fortuna invertida: Periodo menos afortunado con altibajos y sorpresas poco agradables. No tenemos el Regulate de lo que sucede. Los cambios suceden rápidamente. Nos indica que debemos utilizar nuestros recursos internos para sobrellevar lo que sucederá hasta que todo se normalice.
RUEDA+LOCO: la persona se va de repente. Nerviosismo. Hiperactividad. No debes dejar que los cambios te aturdan y te hagan dar malos pasos.
El Sol, carta XIX del Tarot, emerge con una luz brillante que disipa toda sombra de duda o incertidumbre. Esta carta irradia éxito, alegría y claridad, ofreciendo un símbolo de optimismo y energía positiva. Al aparecer en una lectura, El Sol es una señal de conciencia plena y de la revelación de la verdad; es el despertar a la luz que nutre y permite que todo crezca y florezca.
Habla sobre la grandeza de espíritu, simboliza también cada uno de los ciclos que se pueden contemplar en el entorno.
No es suficiente saber los significados, es importante aprender a pensar y a relacionar los arcanos entre sí. ¡A tu ritmo y con soporte 1 a 1 siempre que necesites!
La destrucción que presagia la Torre se refiere a todo aquello que lastra el avance del consultante, lo que lo retrasa o detiene, pero al aparecer junto a La Rueda de la Fortuna esto se mitiga, e incluso podría ser una combinación positiva.
Intenta no despreciar estas oportunidades, que te tiene preparada la buena suerte que te acompaña.
En la pareja, la Rueda de la Fortuna con el Sol augura el fin de una etapa y la toma de decisiones que beneficiarán a ambos. Si la pareja acaba de atravesar un momento díficil, estos naipes nos indican un cambio positivo en los acontecimientos. Momento de gran amor y plenitud.
En el tarot la aparición de La Estrella siempre va ligada las buenas perspectivas de futuro, en donde el destino nos tiene preparada una sorpresa agradable y que debemos aprovechar porque solo se presentará una vez.
Sobre ella hay una esfinge que porta sobre su hombro una espada que apunta al cielo y que representa a algo tan necesario como la suerte y también a la riqueza –que puede ser de muchos tipos-.
inestabilidad, golpe del destino, bloqueo, retraso, caída, Como décimo arcano mayor del Tarot de Marsella, la Rueda de la Fortuna despierta intrigas de inmediato por la complejidad de su simbolismo Visible. La carta muestra tres animales encaramados en una rueda giratoria, la cual, a su vez, simboliza el transcurso de la vida y el destino. En lo alto de esta rueda se halla una esfinge azul provista de una corona amarilla y unas alas rojas. Cómodamente sentado sobre una plataforma, parece ser el único personaje capaz de activar el movimiento de la rueda. El animal de la derecha está situado en el lateral izquierdo del dispositivo y efectúa un movimiento ascendente. Su silueta de shade amarillo recuerda a la de un perro, a menudo asociada con la thought de la muerte, como muestra el ejemplo de Anubis, sin ir más lejos. El tercer animal es más fácil de identificar. Se trata sin duda de un pequeño mono de coloration carne. Está situado en el lateral derecho de la rueda y es arrastrado hacia abajo.
Hora de poner el “espejo retrovisor” en los cambios que has realizado visit hasta ahora en esta área de tu vida para evaluar si realmente fueron positivos o no. Una autoevaluación de cómo te has estado relacionando con lo divino y con tu propia esencia es muy necesario para seguir avanzando.
El significado de estas cartas se encuentra estrechamente ligado a las buenas vibraciones y a los acontecimientos cargados de energía positiva, sus revelaciones se orientan principalmente hacia la suerte, la felicidad, las situaciones nuevas y el triunfo.